El 25 de mayo de 2025, Roland Garros se rindió ante Rafael Nadal con un homenaje sin precedentes. En la pista principal, la Philippe Chatrier, el mallorquín recibió el tributo de sus eternos rivales, de su familia y de miles de fanáticos que corearon su nombre. Una despedida cargada de emoción para quien convirtió la arcilla parisina en su reino.
A sus 38 años y tras su retiro en 2024, el español fue celebrado en una ceremonia que reunió a leyendas del deporte como Roger Federer, Novak Djokovic y Serena Williams, además de familiares y una multitud de admiradores que colmaron la cancha.
En un gesto que conmovió a todos, su tío y exentrenador Toni Nadal le entregó una raqueta simbólica, la misma que usó en su primer Roland Garros, mientras el público coreaba su nombre entre lágrimas y aplausos. Nadal, visiblemente emocionado, se arrodilló sobre la arcilla, besó el suelo y murmuró: “Aquí empezó todo”. Un momento que quedará grabado para siempre.
El evento comenzó con un emotivo video que recorrió la trayectoria de Nadal en Roland Garros, desde su primer título en 2005 hasta su última victoria en 2022. Las imágenes provocaron lágrimas en el tenista, quien no pudo contener la emoción al ver reunidos a sus grandes rivales y amigos: Roger Federer, Novak Djokovic y Andy Murray. Juntos, los cuatro protagonizaron una escena que quedará grabada en la memoria del tenis mundial.
«No nos podíamos imaginar en 2005 que hoy estaríamos aquí, veinte años después, siendo una familia», expresó Nadal con la voz entrecortada, dirigiéndose a su esposa Mery Perelló, presente en las gradas junto a su hijo. «Has estado siempre donde te he necesitado, apoyándome desde una posición no siempre fácil. Espero poder hacerte igual de feliz que tú me has hecho a mí», añadió, provocando una ovación del público.
El momento culminante llegó con la descubrimiento de una placa con la huella del pie de Nadal, colocada junto a la red de la cancha central. Este gesto simboliza la profunda conexión entre el tenista y Roland Garros, un vínculo que trasciende los récords y las estadísticas.
La ceremonia también contó con la presencia de figuras actuales del tenis, como el español Carlos Alcaraz y la polaca Iga Swiatek, quienes rindieron homenaje al legado de Nadal. La emoción fue palpable en cada rincón del estadio, reflejando el impacto que Rafa ha tenido en varias generaciones de deportistas y aficionados.
Más allá de sus logros en la cancha, ha sido un ejemplo de humildad, perseverancia y pasión por el deporte. Su influencia se extiende fuera de las pistas, siendo un referente para millones de personas en todo el mundo.
Ariel Pérez Evans, 2° A, turno tarde