La Nación terminará obras de estaciones de subte

La Ciudad decidió ceder las obras del viaducto de la línea San Martín, que incluyen las estaciones de subte Villa Crespo y La Paternal y […]

La Ciudad decidió ceder las obras del viaducto de la línea San Martín, que incluyen las estaciones de subte Villa Crespo y La Paternal y la vía cuarta entre Palermo y La Paternal.

Darle estas obras a la Nación garantiza que se hagan las contrataciones necesarias para terminar las obras, inconclusas desde 2019.

La transferencia quedó oficializada con la firma de un acta de entrega de las obras, que fue refrendada por el secretario de Transporte y Obras Públicas del GCBA, Juan José Méndez, el presidente de ADIF-SOFSE, Martín Marinucci, y el vicepresidente de ADIF, Rodrigo Álvarez.

Según confirmaron de la ADIF se pondrá de inmediato a trabajar sobre el tema y esperan que se puedan cumplir los trabajos en un corto lapso de tiempo.

Si viajáramos en el tiempo podríamos ver que estas obras como las del viaducto entre Palermo y el puente de la Av. San Martín fue inaugurado en julio de 2019. Sin embargo al poco tiempo de la apertura un escandalo sobre los contratistas hizo que en septiembre la Ciudad prescindiera de sus servicios.

Debido a que quedaban otras obras por terminar, en diciembre de 2019, la Ciudad relanzó los planes de terminación de las estaciones Villa Crespo y La Paternal a través de la empresa estatal porteña AUSA. No obstante, tras el estallido de la pandemia los plazos se dilataron.

Tras eso, el gobierno de la Ciudad determinó que estas obras no formaban parte de la prioridad. Esto generó que poco a poco, hasta la determinación final como ahora, las obras pasen a la órbita nacional.

Ley 670 y como hubiese quedado la ciudad si se hubiese aplicado la ampliación

Cabe destacar que estas no son las primeras obras de transportes inconclusas en la Capital Federal ya que hace poco se cumplieron 20 años de la ley 670 iniciada por Aníbal Ibarra, por entonces jefe porteño en 2001, y continuada por el PRO que constituía en abrir nuevas líneas de subtes que hubiese transformado a la Ciudad de Buenos Aires al nivel de redes de Los Ángeles y París.

Tomás Oliver