Un día fue el rey. Toda la música afroamericana y urbana de New York y de Estados Unidos debía pasar por él para lograr el estrellato. Bastaba solo hacerle el gesto de un pulgar arriba a un rapero, para que este se vuelva el más escuchado en todo el mundo. Pero así como los charts, todo lo que sube, tiene que bajar. Incluso David King, el mejor productor musical de los últimos 40 años, el poseedor del “mejor oído musical”, el fundador de Stackin’ Hits Records, de la que vendió su parte algunos años atrás. En el presente, King busca evitar que su disquera sea comprada por una compañía rival por lo que se propone arriesgar todos sus bienes, para no perder su trono. Pero, una llamada anónima hecha a perder todos sus planes.
El director Spike Lee propone una reversión del film de Akira Kurosawa, High and Low (1963), que a su vez fue una libre adaptación de la novela King’s Ransom, escrita por Ed McBain. En esta versión, con Denzel Washington en el papel de David King, Jeffrey Wright como su chofer, Paul Christopher y la participación del rapero A$AP Rocky, la trama gira alrededor de un productor musical dispuesto a realizar una movida arriesgada para evitar perder su discográfica que se encuentra en una encrucijada cuando el secuestrador se equivoca y toma como rehén a su ahijado, hijo de su chofer, en lugar de su hijo.
Highest 2 Lowest no tiene una trama muy difícil ni tampoco grandes encrucijadas que produzcan al espectador dolores de cabeza al tratar de entender lo que está sucediendo. La historia y el giro te lo cuentan en los trailers, incluso el antagonista es revelado, además de que es bastante obvia su motivación. Por lo que se entiende que Lee no quiso contarnos la historia del productor, el secuestro de su ahijado y de su resolución sino que quiso contarnos sobre New York.
En los 133 minutos de duración, todo el tiempo presenciamos una referencia sobre la cultura neoyorquina (la intro de la película son casi cinco minutos de tomas aéreas sobre New York), lo cual no se ve como algo negativo, al contrario. Por ejemplo, una escena clave transcurre mientras ocurre una celebración sobre Puerto Rico, con músicos en escena. La música soul, blues, funk y el rap también se hacen presentes, pero no simplemente en el soundtrack, también con apariciones o cameos: Ice Spice, LaChanze, Princess Nokia y obviamente la incorporación de A$AP Rocky pero esto no es solo porque el protagonista sea productor, sino también porque son parte de la esencia y cultura afroamericana. Por eso es que Spike Lee aprovecha esta oportunidad para contarnos una vez más su amor por su ciudad, por su cultura, por su identidad. Y reitero, es completamente válido.
Que este gran director, que nos trajo películas como Malcom X (1992) e Infiltrado en el KKKLan (2018) utilice esta nueva película, o joint (como Lee suele llamar a sus películas) para volverse nostálgico sobre la ciudad que ama y lo haga funcionar tan bien, habla de unas grandes habilidades como director.
En Highest 2 Lowest podemos disfrutar de David King interpretado por un Denzel más Denzel que nunca, es él en pantalla haciendo lo que sabe y cómo lo sabe hacer: excelente. No es la primera colaboración entre Lee y Washington, por lo que se nota que la química entre director y protagonista funciona a grandes niveles de compatibilidad. Jeffrey Wright (Basquiat de 1996 o The Batman de 2022) realiza un muy buen trabajo como un secundario que por momentos toma protagonismo en escenas claves (el cara a cara con John Douglas Thompson genera una tensión que incomoda al espectador al punto de querer escapar).
La película no es una pieza de arte única, ni incluso es original (es una remake de una adaptación libre de una novela), probablemente no se convierta en un clásico del cine que en 50 años se estudie en la universidad, ni tampoco es una película más. Highest 2 Lowest es una carta nostálgica y de amor hacia New York y su gente, escrita con pasión y firmada al pie por Spike Lee.
Highest 2 Lowest tuvo un pequeño paso por cines norteamericanos antes de su estreno definitivo en Apple TV el 15 de septiembre, donde actualmente se puede ver.
Alexis Mercado