El Club Atlético Ferrocarril Midland, conocido popularmente como «El Funebrero», escribió la página más gloriosa de sus 111 años de historia al sellar su ascenso a la Primera Nacional, la segunda categoría del fútbol argentino. La gesta se consumó tras una temporada 2025 absolutamente dominante en la Primera B Metropolitana, que culminó con la obtención del título de Campeón Absoluto de la categoría. Este logro representa su primera incursión en la segunda división profesional, un hito largamente anhelado que desató una euforia total entre sus hinchas.
La consagración de Midland no fue fruto de la casualidad, sino de una campaña perfecta. El equipo, dirigido técnicamente y con la gestión de figuras clave como el exfutbolista Agustín Orión, demostró una superioridad contundente a lo largo del año, estableciendo un camino sin precedentes en la categoría. Primero, se quedaron con el Torneo Apertura a mitad de año, superando a rivales directos como Real Pilar. Esta victoria inicial ya les otorgaba la llave para el ascenso directo.
El destino final se resolvió en la última jornada del Torneo Clausura, el 15 de noviembre de 2025. A pesar de caer 1-0 ante Flandria, un resultado que generó un clima de máxima tensión en la localidad de Libertad, la definición se dio gracias a un resultado ajeno: su único escolta y aspirante al título, Real Pilar, cayó por el mismo marcador (1-0) contra Liniers. Al no poder alcanzar la línea de Midland en la tabla anual, este resultado aseguró que «El Funebrero» se quedará también con el Clausura. Al ganar ambos torneos de la temporada, Midland se coronó Campeón Absoluto de la Primera B Metropolitana, logrando así el codiciado ascenso directo a la Primera Nacional.
Los números de Midland en la Primera B Metropolitana 2025 hablan por sí solos y justifican la hazaña. A lo largo de la temporada regular, el equipo de Libertad se consolidó como el más ganador, cosechando 22 victorias, y el que menos perdió, con solo 6 derrotas en 40 encuentros.
La identidad de juego sólida y el compromiso colectivo inquebrantable que sostuvo el conjunto fueron las claves para mantenerse en lo más alto de la tabla durante gran parte del certamen. La consagración se vivió con enorme emoción entre los hinchas, que siguieron minuto a minuto las incidencias y desataron una celebración que rápidamente se trasladó a las calles de Merlo, con banderas, caravanas y agradecimientos a un plantel que devolvió al club a la segunda categoría del fútbol argentino.
