El barrio de Palermo quedó conmocionado tras un violento episodio ocurrido el jueves 13 de noviembre por la tarde, cuando una nena que volvía de una actividad extracurricular fue pateada en plena vereda por un hombre que venía caminando en sentido contrario. Las cámaras de seguridad registraron el momento en el que el atacante se detiene frente a la menor y le da una patada en la zona del pecho, mientras su madre avanzaba algunos pasos detrás con un cochecito. De inmediato, la mujer corrió a asistir a su hija y alertó a los vecinos, quienes denunciaron lo ocurrido a la Comisaría Vecinal 14 A, ubicada a pocos metros. El hecho se se produjo entre las calles Güemes y Gurruchaga.
Un policía que se encontraba en la cuadra intervino rápidamente y retuvo al joven, un ciudadano venezolano de 22 años que llevaba colgado un certificado de discapacidad con sus datos personales. Minutos después se presentó la madre del agresor, quien explicó que su hijo tiene un retraso madurativo. Tras constatar la documentación, la Unidad de Flagrancia Norte ordenó iniciar una causa por lesiones, tomar declaración a la madre de la nena y dejar al joven en libertad. El SAME revisó a la menor y confirmó que no sufrió heridas de gravedad, aunque sí un fuerte impacto emocional.
La situación generó preocupación entre vecinos y familias de la zona, especialmente en la comunidad del Boston College, ubicado a pocas cuadras del lugar. En grupos de padres comenzó a circular un mensaje advirtiendo sobre el hombre y sugiriendo precauciones al transitar por la zona. Aunque la investigación continúa, el caso abrió un debate sobre la respuesta institucional frente a personas con padecimientos psiquiátricos que circulan sin acompañamiento, así como sobre la necesidad de medidas que protejan a la comunidad sin vulnerar derechos.
Ariadna Lisette Santillán Alfano, 2° A TT
