El Hospital Garrahan anunció un aumento cercano al 60 % en la asignación básica de los salarios para su personal. La medida alcanza a trabajadores de planta, contratados bajo régimen público, becarios y residentes. Según informó la institución, el incremento es retroactivo a octubre y se financiará con fondos propios hasta que se acrediten las partidas nacionales correspondientes.
Desde la dirección del hospital destacaron que este aumento forma parte de “un proceso de orden, transparencia y eficiencia” iniciado con la nueva gestión nacional a fines de 2023. Además, recordaron que en septiembre ya se habían otorgado bonos mensuales de $350.000 para el personal no asistencial y $450.000 para el asistencial, también con recursos internos.
Aunque el porcentaje anunciado suena contundente, el impacto real en el bolsillo de los trabajadores podría ser menor, ya que el 60 % se aplica sólo sobre la asignación básica y no sobre el salario total. Fuentes gremiales estiman que la mejora efectiva rondará entre un 35 % y un 40 %, dependiendo de la categoría y el tipo de contrato.
El aumento llega después de meses de reclamos por recomposición salarial. Residentes, becarios y personal de enfermería habían advertido sobre una pérdida de poder adquisitivo superior al 50 % desde diciembre de 2023. En ese contexto, la medida se interpreta como una respuesta directa a las tensiones laborales que atravesaba uno de los hospitales más emblemáticos del sistema público argentino.
Sin embargo, no todos celebran sin reservas. Los trabajadores consultados valoran el avance, pero mantienen dudas sobre su sostenibilidad. La gestión del Garrahan afirmó que el aumento se cubre con recursos propios, aunque todavía no se precisó cómo impactará en el presupuesto operativo del hospital, que ya enfrenta desafíos financieros para mantener su nivel de equipamiento y atención.
La medida también abre interrogantes sobre su alcance real. No está claro si el porcentaje se aplicará de manera uniforme a todas las categorías o si habrá diferencias entre planta permanente, residentes y becarios. Tampoco se especificó si el aumento se actualizará en línea con la inflación, lo que determinará si se trata de un alivio momentáneo o de una recomposición duradera.
Desde el Gobierno nacional, el anuncio fue presentado como “un reconocimiento histórico al compromiso y la vocación del personal del Garrahan”. Sin embargo, especialistas advierten que el aumento, aunque significativo, no alcanza por sí solo para revertir la caída del salario real de los últimos años.
El Garrahan, con más de 4.700 trabajadores, es el principal hospital pediátrico del país y un símbolo del sistema público de salud. En los últimos meses, había sido escenario de protestas y paros parciales impulsados por reclamos salariales y la sobrecarga laboral en áreas críticas.
Con esta medida, el Ejecutivo busca enviar una señal política y social: respaldar a los equipos de salud en un contexto de alta inflación y tensión presupuestaria. No obstante, el desafío de fondo sigue siendo estructural: garantizar salarios dignos y estables sin comprometer la sustentabilidad de los hospitales públicos.
En definitiva, el aumento del 60 % en el Garrahan representa un avance, pero no el punto de llegada. Es un paso necesario para recomponer ingresos y reconocer el esfuerzo de quienes sostienen día a día la atención pediátrica más compleja del país. El impacto real, económico y simbólico, dependerá de si esta decisión logra transformarse en una política sostenida y no en una respuesta aislada a la crisis salarial del momento.
Emmanuel Dario Mamani, 2°A T.T
