El gobierno tomó la decisión de simplificar y mejorar los trámites en los aeropuertos para que los chicos puedan viajar fuera del país sin la compañía de uno o ambos padres.
A partir de ahora, la autorización de viaje se puede cargar digitalmente en el pasaporte del menor, lo que permite validarla al instante gracias a un código QR. Además, ya no es necesario que las aerolíneas verifiquen los permisos: ese control queda exclusivamente en manos de Migraciones, el organismo del Estado encargado de controlar quién entra y quién sale del país.
Cómo se hace el trámite y qué opciones ofrece
El trámite de autorización puede realizarse en más de 100 oficinas de Migraciones en todo el país. La demora varía: puede tardar 10 días hábiles, 48 horas o incluso apenas 2 horas, según el tipo de gestión.
Existen tres tipos de autorización según la duración: una válida para un solo viaje (cuando se conoce la fecha, la persona que acompaña al menor y el motivo del viaje), otra que dura seis meses o hasta un año, y una tercera opción válida hasta que el menor cumpla 18 años. Esta última es la más duradera, se realiza una sola vez y sirve para cualquier viaje que el menor haga.
Tiene que tener ciertos requisitos el menor para que pueda viajar afuera sin problemas
Cuándo es obligatorio el permiso
El permiso es obligatorio cuando el menor viaja solo, con solo uno de sus padres o tutores, o con una persona que no sea ni madre ni padre, como un abuelo, tío, profesor o acompañante. En cambio, si viaja con ambos padres, no hace falta el permiso: basta con presentar los documentos que prueben el vínculo, como la partida de nacimiento.
Este documento permite a las autoridades migratorias verificar que el menor está autorizado para salir del país bajo determinadas condiciones, con el fin de proteger sus derechos, su seguridad y prevenir delitos como la trata de personas.
Viajar solo, pero acompañado por el sistema
Para que los chicos viajen seguros cuando no van con adultos, Aerolíneas Argentinas ofrece un servicio especial de acompañamiento. Es obligatorio para menores de entre 5 y 11 años y opcional para los de 12 a 15. Solo se permite en vuelos directos o con conexión de hasta 5 horas, realizados por la aerolínea.
Además, los menores deben entender las instrucciones de seguridad, saber usar el cinturón y la mascarilla de oxígeno, y estar preparados para evacuar si hay una emergencia. En caso de que no cumplan estos requisitos, deberán viajar acompañados por un adulto.
Es fundamental reservar el servicio de acompañamiento con al menos 72 horas de anticipación. También se debe llevar el formulario impreso en cuatro copias, quedarse en el aeropuerto hasta que el avión despegue, y asegurarse de que al llegar, alguien reciba al menor con su DNI.
Cuando se realiza el trámite de Autorización de Viaje, se debe elegir la duración del permiso según las necesidades del menor y de la familia. Esta decisión depende de la frecuencia de los viajes, quién suele acompañar al menor, el deseo de evitar repetir trámites y el nivel de control que los padres o tutores desean tener sobre los viajes.
Objetivos de la medida
Los objetivos principales de esta medida son hacer los viajes más seguros, rápidos y sin tantas complicaciones, usar la tecnología para controlar mejor y evitar fraudes o delitos como la trata de personas y facilitarles la vida a las familias que viajan con o sin sus hijos.
Con los cambios introducidos por el Gobierno, el trámite de la autorización de viaje evolucionó hacia un sistema 100% digital, mucho más seguro y moderno. Gracias a la Disposición 676/2025, la autorización puede quedar registrada electrónicamente en el pasaporte del menor al momento de su emisión. Esto significa que ya no es necesario llevar papeles físicos adicionales si la autorización fue emitida digitalmente y está cargada en el chip del pasaporte.
Además, el formulario emitido por la Dirección Nacional de Migraciones ahora incluye un código QR que permite a los agentes verificar en tiempo real si la firma digital es válida y si el documento es auténtico. Este proceso acelera los controles fronterizos y evita falsificaciones o permisos adulterados. Otro punto clave es que el control de los permisos ahora es exclusivo de Migraciones, ya no recae en las empresas de transporte, lo que elimina pasos redundantes sin reducir el nivel de seguridad.
Juan Parisi – 2°B Turno Mañana