Alberto “Beto” Márcico, exfutbolista e ídolo del Club Atlético Boca Juniors, enfrentará junto a uno de sus hijos, Lucas, un juicio oral acusado de haber defraudado a múltiples clientes mediante emprendimientos inmobiliarios. La causa, que comenzó en 2019, incluye 22 hechos de defraudación y 15 denuncias por estelionato, entre ellas la venta de una misma propiedad a distintas personas. Además, en una causa paralela se investiga el presunto delito de asociación ilícita, que involucra a otros imputados como Pablo Márcico, otro hijo del ex futbolista, y Omar Martiarena, un supuesto corredor inmobiliario.
La investigación judicial, iniciada por el fiscal Andrés Madrea, expuso un entramado que habría comenzado en 2006 con la conformación de dos empresas dedicadas a la venta de departamentos en construcción: Los Lofts de Godoy y Edificio Migueletes SRL. En este último proyecto, ubicado en la calle Benito Quinquela Martín 1755, en Barracas, es donde se concentran las denuncias.
En 2017, Marta R., una empresaria jubilada de 77 años, denunció haber adquirido 16 departamentos y 6 cocheras en el Edificio Migueletes, proyecto de Márcico. La compra fue formalizada con boletos de compraventa firmados con el ex futbolista y certificados notarialmente. A pesar de haber abonado el total de las unidades, la mujer nunca recibió la posesión de los inmuebles. Según la declaración, ocho de esas propiedades fueron vendidas a otras personas, y una de ellas, la unidad 6A, fue comercializada dos veces en menos de cuatro meses. En total, los imputados habrían recaudado 5,4 millones de dólares por estas operaciones, mientras que la denunciante asegura haber pagado aproximadamente 750 mil dólares por las unidades adquiridas.
Ante la falta de respuestas y tras varias intimaciones sin resultado, Marta R. inició la causa penal. En 2022, la justicia procesó a Márcico y su hijo Lucas, embargándolos por 1,8 millones de dólares y 2 millones de pesos. Ese mismo año, el fiscal pidió elevar la causa a juicio.
El intento más reciente de los Márcico para evitar el proceso fue a través de una audiencia por Zoom con el Tribunal Oral en lo Criminal N.º 1, donde ofrecieron pagar 295 mil dólares para cerrar el expediente mediante una probation. Sin embargo, la propuesta fue rechazada por no convencer a ninguna de las partes debido a que la cifra real era mucho mayor.
Al mismo tiempo, la situación financiera de Edificio Migueletes SRL también llegó a los tribunales: en agosto de 2024, el Juzgado Comercial N.º 25 decretó su quiebra. Además, se investiga la participación de otro hijo de Márcico, Pablo, y de un supuesto corredor inmobiliario, Omar Martiarena. Ambos fueron imputados por posible asociación ilícita, aunque no están incluidos en este juicio oral.
Un ídolo de Boca que atravesó problemas con la AFIP
En un contexto diferente, otro ex futbolista e ídolo del club xeneize, Carlos Tevez, también se ha visto envuelto en disputas legales relacionadas con sus finanzas personales. En febrero de 2022, fue condenado a saldar una deuda de 42 millones de pesos con la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos) debido a un atraso en el pago del impuesto de bienes personales. El fallo judicial lo intimaba a cancelar 42.361.511,85 pesos en concepto de intereses por los montos debidos de ese tributo, deuda que data de 2020, cuando el exjugador se retrasó en los pagos correspondientes a los anticipos 1, 2 y 3 de dicho gravamen.
Sin embargo, este no fue el único conflicto entre Tevez y la AFIP. En 2021, el futbolista se negó a abonar el Aporte Solidario, un impuesto aprobado por el Congreso para gravar una fracción del patrimonio de las 12 mil personas más ricas del país con el objetivo de paliar los efectos económicos de la pandemia. Ante la obligatoriedad de este tributo, el ex futbolista presentó un amparo judicial para evitar su pago, pero en diciembre de 2022, el juzgado Contencioso Administrativo Federal 5 rechazó la medida cautelar y ordenó que el futbolista cumpliera con el pago.
Nicolás Villalba – 2°B Turno Mañana