Vecinos del barrio de Saavedra denuncian desde hace años el avance de concesiones privadas, eventos masivos y obras postergadas en el Parque Sarmiento, uno de los espacios verdes más grandes de la Ciudad de Buenos Aires. Afirman que los negociados le están ganando terreno al uso público, provocando desgaste ambiental y ruidos molestos.
El Parque Sarmiento, con sus 74 hectáreas, es un punto de encuentro diario para familias, deportistas y vecinos de Saavedra y los barrios aledaños. Sin embargo, en los últimos años, su carácter público se ha visto erosionado por concesiones privadas, recitales multitudinarios y el uso intensivo de su infraestructura deportiva, generando un creciente malestar comunitario.
Según datos oficiales, 12 hectáreas del parque (un 16 % del total) están explotadas por privados mediante adjudicaciones directas sin instancias de participación ciudadana. Entre los concesionarios destacan:
- Belgrano Athletic Club, que ocupa 6,5 hectáreas para sus canchas de rugby (aunque con permiso de uso no exclusivo).
- Sebastián Battaglia (ex futbolista y ex DT de Boca), con canchas de fútbol y una ampliación de 4.428 m² para pádel.
- Omar Galdino Carminatti, ex preparador de Gabriela Sabatini, con canchas de tenis.
- Asociación de Ciclismo de Buenos Aires, con su centro de iniciación y entrenamiento.
Desde 2023, se autorizaron recitales de gran escala que en varios casos excedieron los 95 dB permitidos por ordenanza. En diciembre de 2024, un show de cumbia marcó picos de 102 dB, obligando a vecinos a cerrar ventanas y alterar sus horarios de descanso.
Los problemas de infraestructura
La pista de atletismo del Parque Sarmiento, inaugurada en 2019 con certificación internacional, fue utilizada como base para montar dos escenarios del Primavera Sound 2023, soportando miles de kilos de estructura metálica y tránsito de maquinaria pesada. Un informe de la Dirección de Deportes porteña advierte fisuras y desgaste prematuro en un tercio de la superficie.
La reparación está presupuestada en 8 millones de pesos, pero aún no se inició. La Comuna 12 construyó una nueva pista de ciclismo que se inaugurará en las próximas semanas, respondiendo a una vieja demanda de los 1.200 ciclistas que entrenan en el entorno. Pero, mientras tanto, el contorno externo sigue expuesto a riesgos de tránsito y carece de infraestructura adecuada.
En 2021 se aprobó destinar 2 hectáreas junto al lago para un reservorio de agua que mitigue inundaciones en la cuenca del Arroyo Medrano. Sin embargo, la obra nunca arrancó y, en su lugar, aparecieron ofertas para concesionar también las canchas de rugby.
“Ese terreno debía servir para no inundarnos; ahora quieren dárselo a un privado”, advirtió Martín Duarte, ingeniero hidráulico y vecino, durante la última protesta, llevada a cabo el último 11 de abril.
Protestas y movilización vecinal
La última manifestación, en Av. Balbín y Larralde, reunió a más de 300 personas con carteles que decían “Parque público, no negocio” y “Defendamos nuestro verde”. La Asamblea Vecinal presentó un petitorio con 5.200 firmas al jefe de Gobierno porteño el 15 de abril.
En la Audiencia Pública del 8 de abril, vecinos destacaron el rol social de instituciones como el Club San Jorge dentro del Parque Saavedra, pero advirtieron la necesidad de garantizar el uso prioritario para escuelas públicas.
Luciana Aguirre, vecina, resaltó: “El club nos abrió las puertas; muchos emprendedores han crecido mucho”. Mariana Zajdman, ex supervisora de educación física, subrayó la importancia de nombrar el uso escolar como prioritario en la Ley. Alejandro Tiscornia, referente de Planeamiento Participativo, criticó el “polideportivo privado” que excluía a escuelas públicas.
Impacto socioambiental y legal
El abogado Jonatan Baldiviezo, del Observatorio del Derecho a la Ciudad, recuerda que la Ordenanza 46.229/1996 prohíbe la privatización de espacios verdes de uso público y exige su protección e incremento. Denuncia que las adjudicaciones directas “desconocen la normativa que regula el uso común y gratuito”. Biólogos de la UBA detectaron cambios en los patrones de anidación de las “lechucitas vizcacheras”, aves declaradas de interés ambiental por la Legislatura porteña, que evitan las zonas cercanas al escenario.

El caso del Parque Sarmiento refleja una tensión creciente entre la lógica del negocio y el derecho al espacio público. La comunidad de Saavedra no se opone al deporte a la cultura o al turismo pero si reclama un uso equilibrado del lugar donde sea prioridad las necesidades del barrio y la protección ambiental.
Fabio Alejandro Dávila Santos – 2°B Turno Mañana