Murió la esposa del golfista Emilio Domínguez luego de contraer dengue

El deportista estaba jugando en México cuando se produjo el deceso. Dolor en el ambiente del golf.

María Victoria De La Mota Claverie, la esposa del golfista argentino Emilio Domínguez, más conocido como el “Puma”, falleció a los 33 años en la provincia de San Luis, tras contraer dengue.

El deceso se produjo mientras el deportista se encontraba disputando la segunda ronda del Totalplay Championship at Atlas Country Club en Guadalajara, ciudad de México.

“La salud de Victoria se deterioró con tal rapidez, que falleció mientras el ‘Puma’ realizaba el viaje de más de 7.000 kilómetros de regreso a casa”, informó el sitio oficial del PGA Tour Américas. Apenas el jugador se enteró de la situación tan complicada que atravesaba su esposa volvió al país, pero lamentablemente no llegó a tiempo.

La pareja se había casado el 17 diciembre de 2016 y tienen dos hijos Constantino e Hipólito, de 4 y 1 año de edad, respectivamente. Sin ir más lejos, el año pasado, Domínguez se consagró campeón y lo festejó junto a su familia.

La noticia no solo golpeó a los más allegados, si no también a todo el mundo del golf, quienes tuvieron la oportunidad de cruzarse y conocer al argentino.

“Estamos en shock. Esta es una gran tragedia”, dijo su amigo y compañero profesional Rafael Echenique, quien creció junto a él en un club de San Luis.

La mamá de ella, Lis Claverie, le dejó un mensaje en un posteo de Facebook, en donde le dedicó un poema del poeta español, Miguel Hernández.

Dicho mensaje está encabezado por “mi pequeña hija ha muerto”.

“Yo quiero ser llorando el hortelano de la tierra que ocupas y estercolas, compañera del alma, tan temprano. Alimentando lluvias, caracolas y órganos, mi dolor sin instrumento, a las desalentadas amapolas daré tu corazón por alimento. Tanto dolor se agrupa en mi costado, que por doler me duele hasta el aliento”, dicen las primeras estrofas del poema.

En cuanto al torneo, siguió su rumbo, pero en honor a ella, y a la familia, tanto los organizadores como los jugadores llevaron puesta una cinta negra en sus gorros e indumentaria.

Julieta Vera, 2°A turno tarde