Lewis Hamilton y un arranque de pesadilla en 2022

El heptacampeón mundial de Fórmula 1 viene protagonizando uno de sus peores arranques de temporada de toda su carrera deportiva, a la cual se le sumó un distante 13er puesto en el pasado Gran Premio de Imola.

Lewis Hamilton y un arranque de pesadilla.
El británico no logra salir del pozo (Foto: Diario Marca)

El pasado Gran Premio de Emilia Romagna disputado en el circuito de Imola marcó el que fue posiblemente uno de los momentos más bajos en la envidiable carrera deportiva del inglés Lewis Hamilton. Tras caer en el corte de la Q2 en la clasificación del viernes y de no poder avanzar posiciones en la carrera sprint del sábado, el piloto de Mercedes acabó la carrera del domingo en un distante decimocuarto puesto en pista (que acabó siendo decimotercero tras la penalización a Esteban Ocon), mientras que su joven compatriota y compañero de equipo, George Russell, acabó cuarto, a solo 8 segundos del podio.

Luego de avanzar tres posiciones en un arranque con pista húmeda, Hamilton cayó al puesto 14 tras parar en boxes para poner neumáticos secos. A partir de allí, arrancó una pesadilla que duraría 43 vueltas, en las cuales se vio atascado e incapaz de superar al Alpha Tauri de Pierre Gasly, a pesar de reiterados intentos. Y para colmo, agregando más sal a la herida, en la vuelta 40 debió ceder la vuelta ante el líder de la carrera y acérrimo rival del británico por el campeonato de 2021, Max Verstappen.

Tal fue el desconcierto, que una vez terminada la carrera, su jefe de equipo, Toto Wolff, se disculpó públicamente con Lewis por la radio, calificando a su coche, el Mercedes W13, como “inmanejable”, y prometiéndole que harán todo lo posible para revertir esta situación.

Wolff defendió públicamente a Hamilton (Foto: Getty Images)

Pero lo que es aún más llamativo es la diferencia de rendimiento con su compañero de equipo, George Russell. El joven británico proveniente del equipo Williams disputa apenas su cuarta temporada en la Fórmula 1 y su primera con el equipo Mercedes, pero aún así ha logrado ganarle 2 veces en clasificación, y acabar por delante de Hamilton en 3 de 4 carreras, además de ser el único piloto en acabar todas las carreras entre los primeros cinco, siendo su podio en Australia su performance mas destacada. Por su parte, Hamilton ya acumula un decimo lugar en Arabia Saudita (donde además cayó en el corte de la Q1) y el decimotercer lugar en Imola, con tan solo dos carreras entre los primeros 5 (podio en Bahréin y cuarto en Australia)

Este sin dudas se presenta como un escenario poco común en la Fórmula 1, categoría que se había acostumbrado a ver al combo Mercedes-Hamilton dominar con mano de hierro temporada tras temporada, llevándose prácticamente todos los campeonatos casi sin oposición alguna, dominio el cual solo Nico Rosberg en 2016 (su compañero de equipo en aquel entonces) y Max Verstappen en 2021 con Red Bull pudieron poner en pausa. Un dominio que a su vez parece haber llegado definitivamente a su fin este año 2022, en el cual el equipo alemán no aparece como protagonista en la lucha por el campeonato, algo que no se ve desde la temporada 2013.

Sin embargo, esta no es la primera vez que se ve al heptacampeón del mundo en una situación similar. El propio Hamilton hizo referencia a ello tras la carrera en Imola. «Hay gente que dice que nunca tuve un coche malo… Y puedo asegurarles que si lo tuve. El McLaren que manejé en 2009 estaba muy, muy lejos, y fue el peor monoplaza que tuve en toda mi carrera.», declaró el piloto ingles, quien aún así se mantuvo optimista ante la posibilidad de revertir el mal momento. «Al igual que aquel auto, al final lo resolvimos y volvimos al juego. Tengo la máxima fe en que mi equipo puede hacer eso también acá», enfatizó.

Lewis Hamilton y un arranque de pesadilla.
El Mercedes W13 está muy lejos del ritmo de Red Bull y Ferrari (foto: Motorlat)

Muchas ideas se teorizan por las cuales Lewis Hamilton no está rindiendo en su nivel. Muchos se preguntan que tanto lo habrá golpeado el final de campeonato del año pasado, en donde el título se le escapó en circunstancias dolorosas y controversiales a manos de Max Verstappen. Allí, en la última vuelta de la última carrera del año, que Hamilton dominó de principio a fin hasta la resalida del coche de seguridad, pareciendo tener ese ansiado octavo campeonato del mundo al alcance de la mano, le hubiese convertido en el piloto mas ganador de la historia de la Fórmula 1.

Lo que se vio en Imola marcó de la forma más cruda posible el presente que atraviesan no solo Hamilton, si no también el equipo Mercedes. Sus dos pilotos se encuentran muy lejos de las posiciones de punta tras cuatro carreras, y con un problema fundamental en sus monoplaza que no parecen tener solución en el corto o mediano plazo. El fenómeno conocido como “porpoising”, o rebote, sufrido por varios equipos en la parrilla, parece afectar severamente al equipo campeón del mundo, costándole muchísimo rendimiento por vuelta.

El equipo Mercedes mantiene la esperanza de poder solucionar sus problemas de rendimiento, aunque descartan estar en la lucha por este campeonato. “Estoy fuera del campeonato, por supuesto. No hay dudas al respecto, pero voy a seguir empujando tan duro como pueda“, reconoció Hamilton. Se espera que los campeones del mundo traigan su primer paquete de mejoras para el Gran Premio de Miami, a disputarse este fin de semana.

Tras solo cuatro carreras, el equipo alemán se encuentra tercero en el campeonato de constructores, 47 puntos detrás de Ferrari, mientras que Hamilton se encuentra séptimo en el campeonato de pilotos, a 58 puntos del líder, Charles Leclerc. ¿Lo mas curioso? su ex compañero de equipo, Valtteri Bottas, ahora en Alfa Romeo, se encuentra inmediatamente por detrás del heptacampeón del mundo, con solo 4 puntos de diferencia.

Campeonato de pilotos tras el Gran Premio de Emilia Romagna (Foto: Formula 1 en Twitter)

Autor: Alejo Lignac; 2°A, Turno Tarde.