El impacto psicológico y físico en los jugadores por la cuarentena

El área de juego de la Subcomisión de Rugby seguro de la URBA, con el Departamento de Médicos, llevó a cabo una conferencia virtual para […]

El área de juego de la Subcomisión de Rugby seguro de la URBA, con el Departamento de Médicos, llevó a cabo una conferencia virtual para preparadores físicos y kinesiólogos de los clubes argentinos para recolectar información sobre la actualidad y el retorno de los jugadores a los entrenamientos, con un protocolo y prevención para comenzar la actividad de manera responsable y segura con los preparadores físicos.

Los invitados fueron el profesor Mario Mouche, licenciado en alto rendimiento, el kinesiólogo Eduardo Tondelli, con el tema de «Herramientas para el retorno saludable para los entrenamientos» y Javier Villa, especializado en psicología del deporte y docente de la UBA con el tema «Estrategias psicológicas en retorno al deporte en el contexto de la pandemia».  Mostraron con estadísticas y estudios previos cómo los jugadores tuvieron que tener una  readaptación de la cabeza con el cuerpo para no sufrir una lesión o desmotivación por llevar mucho tiempo sin poder entrenarse por la cuarentena.

Javier Villa explicó datos psicológicos del deportista durante la cuarentena y los aspectos que influyen en el jugador por el temor de contagiarse. También cómo se llevó a cabo el acompañamiento del cuerpo médico y psicológico al deportista, el cual fue fundamental con herramientas prácticas para el retorno al entrenamiento.

El impacto psicológico por la cuarentena en el rugby se muestra por la motivación y variables sociales sobre la pandemia y la crisis. Hay variables biológicas por el desentrenamiento, alimentación y descanso; variables emocionales como la ansiedad, la irritabilidad y el estrés. Y, por último, las  cognitivas, que llevan al jugador a tener una percepción y eficacia, de riesgo y posibilidad de lesiones. Villa explicó, a través de una encuesta realizada a diferentes jugadores, el impacto que ha tenido la cuarentena: una baja motivación del 62,5% de los jugadores, a un 30% se le dificultaba organizarse, 65 % manifestaron que su estado físico bajó, el 43,7%  empeoró en su alimentación y un 48% de ellos tuvo cambios en el descanso. Entre las máximas preocupaciones los consultados marcaron la posibilidad de un bajo rendimiento y el aumento en las chances de lesionarse.

La influencia que ha tenido la cuarentena en el deporte y el ejercicio físico ha mostrado repercusiones en la reducción del tiempo dedicado al entrenamiento con un promedio de 72.91 por sesión. Las metas se han visto afectadas en su cumplimiento en un 86,1%. Las emociones influyen mucho. Un 64,1% reflejó ansiedad ante la situación de la pandemia, un 40,1%, tristeza, otro 27,9%, ira y el
23,8%, temor. También hay preocupación por la posibilidad de lesionarse (un 76% de los encuestados lo señaló) y de contagiarse del COVID-19, un 71%.

Así también, el docente de la UBA mostró las recomendaciones que deben llevar los preparadores físicos con sus jugadores como poder definir los objetivos deportivos con el planteamiento de metas y trabajo sobre expectativas, explicar los objetivos para cada fase ( ¿qué y cómo?) y,  por último, la prevención de lesiones con el vínculo cercano al jugador haciendo que entienda que tiene que lograr su objetivo.

La idea de la conferencia virtual era mostrar que desde marzo, cuando se suspendieron las competencias y entrenamientos, hasta que se volvieron a retomar, hay varios puntos claves para prevenir las lesiones. Tondelli mostró un seguimiento y datos epidemiológicos del departamento médico-kinésico de la URBA, que se le hizo desde 2019 a los jugadores en los cuales hay riesgos relativos en una lesión. El estudio revela que desde el 2017-2018 y 2020 ha habido más consultas en pretemporada sobre lesiones de tendón de Aquiles y tendón rotuliano.

En 2019 hubo más incidentes, frecuentemente en primera línea o en backs por trauma en los músculos isquiotibial, gemelos y cuádriceps con hematomas. La más consultada en pretemporada, y la más frecuente en 2020, fueron los huesos, dolor en tibias, pies, muñecas y manos. Y la más severa de todos los años fue por contacto articular de hombros y luxación por tobillo. Por esta razón, en la cuarentena se hicieron videos por Zoom para tener un plan de ejercicios de protección previos al retorno a los entrenamientos que tenía como objetivo que los jugadores se focalicen en la protección de zonas de altas incidencias  de lesión y prepararse para futuras existencias.

La propuesta del plantel en los entrenamientos en cuarentena se hicieron en los domicilios con ejercicios isométricos, sebt con saltos y golpes para cuello, tobillo, isquiotibiales y hombros. Con un seguimiento por 4 semanas y en la 5 semana se evaluaba el rendimiento. De esta forma los preparadores físicos, kinesiólogos y psicólogos logran mantener la salud, seguridad y responsabilidad de cada deportista para la reconstrucción social de seguir avanzando en el rugby en época de pandemia.

Andrés Martínez Hurtado, 2° B, turno mañana