Andreescu, la joven maravilla del tenis

Sin duda 2019 será un año que esta joven tenista recordará por el resto de su vida como aquel que registró su primer paso grande […]

Sin duda 2019 será un año que esta joven tenista recordará por el resto de su vida como aquel que registró su primer paso grande en la élite del tenis. La temprana eliminación en primera ronda de la qualy en la pasada edición del US Open ante Olga Danilovic ha quedado en el cajón del olvido y dentro de un tiempo será una divertida anécdota para una joven que tiene un futuro repleto de éxitos por delante. El primero de ellos se dio ni mas ni menos que ante Serena Williams y en el Arthur Ashe.

Bianca Vanessa Andreescu, la tenista de Canadá de tan solo 19 años y de raíces rumanas por parte de sus padres, que por cuestiones laborales tuvieron que emigrar a Canadá. 

«Nací en Canadá pero cada seis meses nos mudábamos de ahí a Rumanía por el trabajo de mi mamá. Incluso fui al colegio en Rumanía un tiempo y es por eso que puedo hablar el idioma», contó en una entrevista a la WTA.

En sus tiempos libres, Bianca es voluntaria en un centro de mascotas y en su casa tiene 4 perros y 1 gato. Su pasión, ademas del tenis, son los animales.

Comenzó a jugar en Rumanía y luego se trasladó definitivamente a Canadá donde se entrenó en el club de tenis de Mississauga. Sus primeros pasos los dio con André Labelle, su coach en Montreal y Nathalie Tauziat, tenista francesa que fuera número 3 de la WTA y finalista en Wimbledon en 1998.

Pero quien la aconsejó y la ayudó a la hora de dar el salto al circuito profesional fue justamente una tenista rumana, Simona Halep, ex numero uno del mundo y ganadora de 2 titulos de Grand Slam. Se conocieron en la Rogers Cup de Montreal en 2016: el tenis y sus origines las unieron de una manera especial. Halep le veía talento a la joven y le aconsejó que dejara el circuito Junior y tomara la decisión de dar el salto al profesionalismo.

Yo me mantuve mucho tiempo allí, hasta los 18, y pienso que fue una perdida de tiempo». 

La joven canadiense se aferró a ese consejo y en 2017 dio el salto definitivo al circuito de la WTA. Su primera aventura fue en el torneo de Washington donde recibió una invitación y debutó en el cuadro principal. Por aquel entonces, vencería a Kristina Mladenovic (N°13 en 2017) y se convertiría así en la tenista más joven en el siglo XXI en vencer a una top 20. Tambien la WTA la reconoció como la jugadora revelación de aquel mes.

Pero sin dudas este año fue el más importante de su carrera, ya que obtuvo sus primeros títulos WTA en el Challenger de Newport Beach (wta 125ks) y en marzo se consagró en el Masters 1000 de Indian Wells tras derrotar a la alemana Angelique Kerber.

Ya no es noticia el talento que posee la joven nacida en 2000 y menos aún luego de ganarle a la leyenda que representa Serena Williams por 6-3, 7-5 en 1 hora y 40 minutos en la final del US Open.

Esta final fue importante para ambas debido a que Serena buscaba su título de Grand Slam número 24 para alcanzar a Margaret Court; ya son 4 las finales perdidas para ella en el último tiempo.

Bianca luego de la final dijo: «De verdad aspiro a ser como ella y quién sabe pueda llegar a ser incluso mejor». Asimismo, contó que Williams le dijo palabras muy alentadoras, que conservará por mucho tiempo. Ademas, declaró que el secreto de su victoria ante una veterana de las pistas, fue tratar de permanecer «todo lo serena posible». 

Andreescu hace un año exacto ocupaba el lugar 208 en el ránking,  y gracias al titulo obtenido semanas atrás en Flushing Meadows se convirtió en la primera tenista canadiense en obtener un título Grand Slam y llegó al partido con Williams invicta (9-0) ante jugadoras top ten. Cuando Bianca jugó su primer torneo profesional en el 2015, Serena Williams ya tenía en sus vitrinas 20 trofeos de Grand Slam. 

La canadiense se convirtió en la primera adolescente en llegar a la final del Abierto de Estados Unidos desde el 2009 cuando lo logró la danesa Caroline Wozniacki, de la misma edad, que la perdió por 7-6 y 6-3 frente a la belga Kim Clijsters.