Medio siglo del primer equipo argentino bicampeón de América

Se cumple medio siglo del primer bicampeón de América, la única vuelta que pudo dar en la 1 y 57 el  equipo dirigido por Osvaldo […]

Se cumple medio siglo del primer bicampeón de América, la única vuelta que pudo dar en la 1 y 57 el  equipo dirigido por Osvaldo Zubeldía que demostró que la mística existe, que con trabajo, que con una manera de analizar y ver el juego del rival los resultados se daban.

El 21 de mayo de 1969 fue un día que ningún fanático del león olvidara. Aquel día venció a Nacional de Uruguay por 2 a 0 con los goles de Marcos Conigliano y Eduardo “Bocha” Flores tras haber perdido en la ida por 1 a 0. Esa noche la capital de Buenos Aires, La Plata estaba pintada de rojo y blanco.

No era sorpresa ni casualidad que los dirigidos por Zubeldía hayan logrado por segunda vez consecutiva llegar a lo mas alto del continente. El año anterior venció nada mas y nada menos que al Manchester United en Inglaterra en la Copa Intercontinental 1968 logrando así llegar al podio mundial. Era un equipo que en el año 1967 lograba tímidamente ganar el Torneo Metropolitano a nivel local, competición que prácticamente la peleaban los cinco grandes del fútbol argentino pero el león se codeaba con los mas altos.

Fue un equipo que sin tener un gran presupuesto anual como los demás equipos de Buenos Aires, supo generarles problemas a sus rivales, logrando tener en sus vitrinas dos Copas Libertadores antes que Boca y River que rompían cada mercado de pases con compras millonarias en esos tiempos para el fútbol argentino.

Estudiantes es un club con mucha historia actualmente, siendo el tercer equipo junto con River Plate en tener 4 Copas Libertadores. Es una institución que comenzó en 1905 con un grupo de aficionados que pertenecían a Gimnasia y Esgrima de La Plata tomaron la decisión de alejarse de ese club para en ese mismo año en la calle 1 y 57 para fundar a Estudiantes de La Plata, nombre característico de estudiantes universitarios de medicina que hacían experimentos con roedores aplicándoles inyecciones para practicar y mejorar sus conocimientos, a partir de allí se denomino el apodo “Pincharata”.

Nùñez Morales Joaquìn 2ºA TM