Un informe de la Universidad Politécnica de Turín y del CONI (Comité Olímpico Nacional Italiano) dio a conocer que el vóley es denominado un deporte “seguro y confiable” respecto de las posibilidades de contagio del COVID- 19, y negó las versiones pasadas que la prensa mundial dio a conocer en el mundo del deporte. Los valores finales mostraron que el voleibol no es el deporte de mayor riesgo de contagio y que incluso está lejos de serlo. La información dada en los últimos días fue una filtración por parte de la Politécnica de Turín, que desmintió que se tratara de resultados finales y marcó que salieron a la luz puntuaciones que designaba cada federación con su criterio subjetivo.
Las evaluaciones se dieron en una escala de 1 a 8 en peligrosidad, donde el vóley tuvo una calificación de 4 en etapas de entrenamiento y 5 en partidos (por debajo del básquet -4 y 7, judo y vela -8- y en la misma línea del tenis); en el primer informe que había sido elaborado, la escala iba del 1 a 4 y exponía al deporte como el más peligroso a la hora de evaluar posibles contagios de Coronavirus, dejando al fútbol como el séptimo deporte con mayor riesgo. Esta información, que fue filtrada, presentó desperfectos mundiales. Deportistas, técnicos e históricos del voley empezaron a manifestar desacuerdos totales con el informe.
El entrenador de la selección de Mendoza, Mauricio Montaruli, afirmó: “Esta pandemia es una situación extraña y nueva para todos, en la cual de a poco vamos retornando a la normalidad de la cosas. Luego de una situación tan desagradecida y violenta, es probable que el gobierno italiano haya pedido la elaboración de un informe para el reinicio de las actividades deportivas con el menor riesgo posible. Quizá no hubo una buena investigación; no es lo mismo el voley que el tenis, ni el rugby que el hockey sobre patines… Considero que se hizo una evaluación rápida y sin tener en cuenta a la gente que trabaja y vive para este deporte. Luego se hizo un trabajo más serio y te diría que podría servirnos relativamente en nuestro país”, concluyó el entrenador mendocino.
El informe, que se hizo con el fin de buscar indicios y medidas para poder reactivar los deportes en general, hizo que el mundo del voley entre en batalla contra la universidad mencionada anteriormente y revisar nuevamente cuál sería el deporte más riesgoso. El reporte fue pedido por el Comité Olímpico Nacional Italiano (CONI).
Este estudio académico hizo que referentes del voley como Julio Velasco, el entrenador que hizo historia con la selección Italiana de vóley, haya repudiado estos informes que difundió la prensa mundial y se refirió en estos términos: “No puedo compartir las bases sobre las que se realizó el trabajo”. Y agregó: “Estoy sorprendido de que una universidad haga un análisis como éste. Tengo cierta experiencia en el campo de la investigación universitaria y lo primero es poder contar con datos homogéneos. Si los números recopilados no lo son, es realmente difícil llegar a un resultado válido. Ni siquiera puedo aceptar ciertas evaluaciones, con comparaciones ridículas y vergonzosas, que espero que no se tengan en cuenta. Definir el voleibol como el deporte más peligroso entre todos los considerados, en términos de contagio para COVID-19, incluso más que los deportes de contacto o incluso de combate, me ha dejado literalmente asombrado desde el punto de vista deportivo», exclamó indignado el entrenador argentino.
El jugador ítalo-ruso Ivan Zaytsev, de Pallavolo Modena, también estuvo en desacuerdo: «Esto me sorprendió y también causó sensación en nuestro mundo porque las indicaciones provienen de la ‘auto evaluación’ de la federación. Quiero pensar que quien los compiló fue demasiado honesto, pero estoy realmente sorprendido”, aclaró.