La pandemia que, de golpe, cambió los formatos de la educación

Desde el 12 de marzo, con el inicio de la cuarentena, la educación se encontró frente a un gran dilema por el ciclo lectivo 2020 […]

Desde el 12 de marzo, con el inicio de la cuarentena, la educación se encontró frente a un gran dilema por el ciclo lectivo 2020 y el presidente de la Nación, Dr. Alberto Fernández, junto a sus colaboradores, debió actuar con prisa para dar continuidad a las clases: decretó que se implemente de forma digital todos los contenidos y sostuvo que «esta cuarentena no son vacaciones y se va a seguir con la enseñanza de forma ininterrumpida«.

Cada provincia buscó la manera de aportarle a los docentes un rápido conocimiento de esta forma de trabajo, ya que es su mayoría, esos modelos no son utilizados cotidianamente. Desde la página educativa de la provincia de Buenos Aires <www.abc.gov.ar>, se informan diferentes softwares con los que se puede interactuar y efectuar cada clase – hay secciones de esta página que están en proceso de creación -. En CABA (http://www.buenosaires.gob.ar) tienen una completa red estudiantil. Cada situación es distinta y todas las provincias utilizan los recursos que tienen a su alcance para incorporarse lo mejor posible a esta circunstancia.

El COVID-19 en nuestro país, provocó que la educación pegue un salto de golpe hacia la era virtual. Un formato rechazado por muchos y amado por otros. No hay otra alternativa para poder afrontar esta situación que utilizar plataformas – Moodle, Blended, etc.- que, lamentablemente, por el intenso uso, colapsaron.

A raíz de este cambio abrupto para los docentes, existen fallas en la implementación del contenido y no todos se están adaptando: no se comprende la dinámica que conlleva esta manera de trabajar, están constantemente enviando materiales, desbordando a sus estudiantes quienes tienen una gran demanda de contenidos que les llega en cada espacio curricular.

Aquellos que han nacido en la era tecnológica, les resulta más atractivo aprender con este estilo, muchos prefieren clases online en donde hay una interacción con el docente. Lo que no significa que del lado del educador esto se pueda aplicar: ya sea por rechazo, por desconocimiento, por miedo a equivocarse frente su curso, entre otras razones.

En ese aspecto Matías Antezana -profesor en Educación Musical y Arte-, manifestó: “Las clases virtuales existen hace más de quince años y por algo no se implementaron. Los profesores te tiran trabajos y no se dan cuenta que los chicos tienen 10, 12 materias, se olvidan que esto es una emergencia, no se acuerdan lo que estamos viviendo”.

El Ministro de Educación, Nicolás Trotta, en diálogo con América Noticias declaró que la vuelta a la escuela será en el momento que el comité de expertos que acompaña al presidente o la OMS lo recomiende”. Se cumplen tres semanas de cuarentena, todavía no empezó lo peor. Es por ello, que a pesar que la cultura educativa se rehúse a incorporar tecnología, que creció de golpe, todos deben esforzarse para saltear los obstáculos que el virus trajo y ganarle a esta prueba que traspasa las aulas, una prueba que puso la vida. ¿Es el inicio de una nueva forma de educar?

Por María Delfina Ibarra Mac Kenna, 2do. A, TM