«Que mis canciones suenen en la radio es un sueño cumplido”

Laura González, la cantante que brilló en los recitales de Axel en el Gran Rex, habló de sus inicios, sus logros y sus proyectos. La […]

Laura González, la cantante que brilló en los recitales de Axel en el Gran Rex, habló de sus inicios, sus logros y sus proyectos. La historia detrás de una voz que busca llegar lejos.

Ir al teatro nutre de cultura, de arte y, la mayoría de las veces, también de pasión. Allí uno puede experimentar sentimientos ya vividos y descubrir muchos nuevos, algo que sin dudas varias personas coincidirán que ocurrió en los conciertos que Axel brindó en el Gran Rex hace pocas semanas atrás. Porque el público no sólo disfrutó del ídolo por el cual pagaron la entrada, sino también de una melodiosa voz que acompañó al músico de Rafael Calzada durante todo el show: la de su corista, Laura González.

Tras años de realizar jingles y de brindar shows en teatros pequeños de diferentes partes del país, a Laura le llegó la gran oportunidad de presentarse en un espectáculo que estuvo en la mira de todo el mundo musical de Argentina, algo que ella ve como trascendental para su carrera. “Cantar con Axel significó la posibilidad de mostrarme como vocalista en grandes escenarios y de llegar a mucha gente que antes no me conocía”, aseguró.

Interpretación de Aguaribay junto a Axel en el Gran Rex. Video: Joha Antognoli (Youtube)

Sin embargo, más allá de los Gran Rex que la tuvieron como protagonista de la canción Aguaribay -uno de los hits correspondientes al último disco de Axel-, la cantante nacida en Buenos Aires ya tiene una extensa trayectoria en el ambiente musical. Comenzó a grabar jingles y música para niños ya desde los cuatro años, algo que, según ella, la marcaría a fuego. “Fui muy estimulada desde pequeña, tuve esa suerte. En la adolescencia vino la rebeldía de no querer dedicarme a lo mismo que mis padres, pero la música volvió a buscarme y aquí estoy”, explicó.

Ese estímulo, que parece algo meramente normal para cualquier niño, era inevitable por un detalle crucial: sus padres son los consagrados músicos Marcelo San Juan y Julia Zenko. A pesar de que reconoce que “jamás la obligaron a nada”, Laura señala que “absorbió como una esponja” la música que su padre le hizo escuchar desde pequeña, y que eso sería determinante a la hora de decidir su futuro. “Yo quería ser veterinaria y trabajar en Mundo Marino, pero paralelamente, como era muy afinada y tenía mucho oído, seguía trabajando en el estudio y me divertía mucho. Hasta que me decidí por dedicarme a la música y comencé a estudiar”, confesó.

Su padre no sólo sería la chispa que encendería la llama de su pasión por la música, sino que la acompañó en cada paso de su carrera artística. Un ejemplo de ello es el álbum solista que Laura lanzó en 2013 y que tituló “Lo que tengo que hacer” -en referencia a la canción homónima incluida en el disco-, en donde Marcelo San Juan compuso tres de los diez temas, sobre cuya elección detalló: “Son canciones que quiero mucho y que fueron seleccionadas por su complejidad armónica y melódica, con aires de R&B y otros ritmos afroamericanos que fueron mis influencias principales en la música”.

Laura presentando su álbum «Lo que tengo que hacer» en 2013. Foto: Verónica Varela

Si de influencias se habla, la intérprete de 34 años no dejó pasar la oportunidad de mencionar al uruguayo Rubén Rada, músico con el cual se dio el gusto de compartir un escenario. “Destaco haber trabajado con Rubén Rada porque crecí escuchando sus discos. El escenario rebosa de swing en sus shows”, resaltó. Hoy en día, además, también trabaja con una de sus hijas, Julieta Rada, con quien integra el trío tributo a Luis Miguel denominado Micky’s, que se completa con la cantante Emme.

Justamente Micky’s es uno de los proyectos que hoy en día más rédito le da a Laura. Los múltiples shows que la banda brindó a sala llena en Capital Federal llamaron la atención de los medios, hecho que derivó incluso en una invitación al programa “Basta de todo” conducido por Matías Martín en la Metro. En relación a eso, y consultada por el posible influjo que podría haber provocado en el grupo la serie que Netflix realizó sobre la vida de la estrella mexicana, González observó: “La idea de crear la banda fue de Emme y surgió mucho antes que la serie, pero por suerte eso ayudó mucho a que la música de Luismi se popularizara aún más. ¡Nosotras éramos fans desde la primera hora!”.

Su vida transcurre entre los coros para grandes artistas -además de Axel, también Tini Stoessel la incluyó en un acústico que realizó para Radio Disney-, los conciertos que realiza con Micky’s y la preparación de nuevo material para su carrera solista, proceso al que define como “largo”, pero que de a poco se ve reflejado en su perfil de Spotify. Mientras tanto, se permite analizar y mirar tanto atrás como hacia adelante en pos de describir sus anhelos más profundos.

Junto a Emme y Julieta Rada en la participación de Micky’s en «Basta de todo». Foto: @bastadetodo

“Cumplí muchos sueños. Por ejemplo, que mis canciones suenen en la radio o viajar por todo el mundo cantando. Fui cantante en cruceros los últimos dos años y fue maravilloso”, asegura en referencia al pasado, a aquellos logros que pudo tachar de la lista de pendientes. Así de clara también es a la hora de proyectar lo que viene, ya que se ilusiona con formar parte de “algún festival internacional de jazz” y con seguir viajando para “compartir la música con músicos de otros países”. De todas formas, si de soñar e ilusionarse se habla, Laura González -de nombre común, pero impronta original- no cavila y sentencia: “Ya vivir de la música hoy es un sueño que se hizo realidad y una bendición”. Un pensamiento firme y decidido, que va a la par de aquella corista que en el Gran Rex no le tembló el pulso para conquistar a miles de personas con su voz.

Imagen destacada: captura de Youtube (Joha Antognoli)

Martín Bugliavaz (2ºB T.N.)