El fútbol amateur, de luto

Nuevamente la desgracia golpeó al futbol nacional y esta vez quien la sufrió en primera persona fue, ni más ni menos, que la Liga Chascomunense […]

Nuevamente la desgracia golpeó al futbol nacional y esta vez quien la sufrió en primera persona fue, ni más ni menos, que la Liga Chascomunense de Fútbol. El pasado domingo era un día más para el humilde Club Deportivo y Fomento Las Mandarinas, hasta que el luto tocó la puerta y lo hizo de la peor manera. Cincuenta y dos eran los minutos que se jugaban, cuando Marcelo Illarra, arquero del conjunto brandseño, cayó desplomado sobre el campo de juego. Sin entender la situación y al observar las convulsiones del histórico arquero del club, una médica que se encontraba observando el encuentro ingresó a la cancha para realizarle los tareas de primeros auxilios, pero su destino estaba marcado.

De acuerdo a lo informado por medios partidarios, el veterano arquero de 34 años fue llevado en ambulancia al Hospital de Brandsen pero previo a su ingreso al nosocomio, su corazón dijo basta. Los rostros de profunda tristeza de los hinchas de ‘Las Manda’ contagiaban a propios y extraños, sin entender como un deportista tan saludable se haya ido de esta forma.

Marcelo o Rulo, como le decían sus amigos más cercanos, además de ser un reconocido albañil del barrio, era futbolista de dicha institución hacía ya diecisiete años. Si bien mucho tiempo estuvo relegado de su puesto y le tocó mirar la campaña de sus compañeros desde el banco de suplentes, este año se había ganado el puesto como el 1 titular del elenco ‘verdeamarillo’, a base de esfuerzo y sacrificio.

“La verdad, estamos todos consternados. Todavía no están los resultados de la autopsia, pero por lo que nos dicen Marcelo habría sufrido una muerte súbita. Fue todo muy repentino, jamás nos enteramos de que hubiera tenido algún problema de salud”, había declarado Santiago Tau, presidente del club, en relación al desafortunado suceso.

Por último, cabe recordar que los dirigentes de la Liga Chascomunense decidieron suspender todas las actividades previstas para el próximo fin de semana. Además, dichas autoridades se reunirán en los próximos días en busca de aportar medidas de prevención para que no vuelvan a suceder casos similares. Lo cierto es que Marcelo dijo adiós y lo hizo con los guantes puestos, defendiendo los tres palos; por donde aquel 8 de octubre no pudo ingresar ninguna pelota.

 

Roncaglia Marcos