El mundo del automovilismo y el cine ya están disfrutando de «F1», una ambiciosa producción dirigida por Joseph Kosinski, conocido por éxitos como Top Gun. Esta superproducción, ambientada en el competitivo universo de la Fórmula 1, busca revolucionar el género de acción deportiva y cautivar tanto a los fanáticos de las carreras como a amantes del cine.
Para Argentina, un país con gran tradición automovilística, el estreno tiene un condimento especial. La figura de Franco Colapinto, cada vez más presente en el escenario internacional, generó entusiasmo entre los fans locales, sobre todo al ser visto junto a Brad Pitt en la premiere del film. La película llegó a los cines argentinos este jueves, como uno de los estrenos fuertes de las vacaciones de invierno. A nivel mundial, «F1» se estrenó el viernes 27 de junio y dos días después en Estados Unidos, con una posterior distribución programada por Apple TV+.
La historia de F1 gira en torno al regreso a las pistas de Sonny Hayes (Brad Pitt), un ex piloto retirado tras un grave accidente en los años ’90. Su excompañero y amigo Rubén Cervantes (Javier Bardem), hoy dueño del equipo ficticio Apex Grand Prix (APXGP), lo convence para volver, esta vez como mentor del joven Joshua Pearce (Damson Idris), una promesa que busca destacarse entre los mejores del mundo. La misión de ambos es llevar al equipo desde el fondo de la tabla hasta competir con las escuderías más fuertes, enfrentando presiones, rivalidades y sus propios conflictos personales.
La película combina acción con una fuerte carga emocional. La relación entre el piloto veterano y su aprendiz, los sacrificios, la amistad y los riesgos del automovilismo dan profundidad a la historia, que va más allá de la velocidad y los autos.
El elenco es impresionante: Brad Pitt, Damson Idris, Javier Bardem, Kerry Condon (como la directora técnica Kate), Tobias Menzies, Kim Bodnia y Sarah Niles. Pero además, aparecen figuras reales de la Fórmula 1, como Lewis Hamilton, Max Verstappen, Charles Leclerc y Fernando Alonso, que se interpretan a sí mismos, aportando un nivel de realismo pocas veces visto.
Para lograr una atmósfera auténtica, se filmó durante fines de semana reales de Grandes Premios. Se usaron circuitos como Silverstone, Spa, Monza, Suzuka, Las Vegas y otros, incluyendo escenas entre el público real y mecánicos durante el calendario oficial.
Uno de los elementos más novedosos es el sonido. Los creadores se enfocaron en capturar el «ruido» real de la Fórmula 1 como parte clave de la experiencia cinematográfica. Hans Zimmer, ganador del Oscar, compuso la música original y trabajó junto a una variedad de artistas como Ed Sheeran, Rosé (Blackpink), Myke Towers, Tate McRae y Chris Stapleton. Todas las canciones del álbum oficial son originales y fueron seleccionadas en función de cada escena, sin importar la fama de los artistas.
Clásicos como «We Will Rock You» de Queen también forman parte de la banda sonora. El británico Lewis Hamilton, además de actuar, fue asesor en el desarrollo del film. Revisó demos musicales y colaboró para asegurar diversidad sonora y cultural. El resultado es una colección de 17 temas que mezclan pop, rock, afrobeat, country y electrónica.
Algunos artistas se inspiraron viendo escenas antes de componer. Ed Sheeran, por ejemplo, creó la canción «Drive» para los créditos finales, basada en frases sobre el personaje de Pitt. El álbum se lanza la próxima semana.
Kosinski expresó su deseo de que la película no solo emocione a los fans de la F1, sino que también acerque el deporte a nuevas audiencias. «Espero que descubran algo», dijo, ya sea un artista nuevo o una nueva pasión por las carreras.
Lourdes Pérez Repetto, 2° A, turno tarde