Oklahoma City Thunder venció 123-107 a Indiana Pacers en el segundo partido de las finales de la NBA e igualó la serie. El triunfo significó un respiro importantísimo para los número uno de la Liga, y es que de esta manera, al ganar al menos uno de los dos encuentros de local, se aseguraron evitar la barrida y volver por lo menos una vez más a su ciudad en esta definición.
El equipo del MVP de esta temporada recuperó su memoria para controlar de principio a fin el partido y, en está ocasión, no permitirles a los visitantes acortarles la diferencia en el tanteador para no sufrir nuevamente un tiro ganador en contra. Demostraron aprender de sus errores del primer encuentro y llevaron sin inconvenientes las riendas para encaminar la victoria.
Con otra gran actuación de Shai Gilgeous-Alexander, el base finalizó la noche con 34 puntos, 5 rebotes y 8 asistencias. A los que además le sumó un bloqueo y 4 robos, realmente el canadiense se destaca en todos los aspectos y rincones de la cancha. Y, cómo ya es característico en él, supo manejar los hilos de su equipo, mantener la calma y todas las emociones a flor de piel con un estadio repleto, apareció en los momentos decisivos. Convirtió once de los doce tiros libres que lanzó, aspecto clave para su juego por la cantidad de veces que va a la línea de los suspiros por las infracciones que recibe.
Un Shai imparable, la única opción es la falta y por eso su visita reiterativamente a la línea de tiros libres, su segunda casa.
La gran diferencia que les permitió a los de Oklahoma salir victoriosos en esta ocasión fue la participación y aporte por parte de sus jugadores de la banca, dónde se debe de destacar a Alex Caruso y Aaron Wiggins. Y es que ambos, cada uno con sus actuaciones anotadoras, 20 y 18 puntos respectivamente, marcaron más que cualquiera de los jugadores de los Pacers.
El base ex Lakers, que suele tener a todos acostumbrados de que resalte por su defensiva, tuvo un gran partido en ofensiva, haciéndose cargo en varias ocasiones de agarrar la anaranjada y atacar sin piedad el aro. Sentenció su partido con 20 unidades, con un 50% de efectividad en tripes y 100% en tiros libres. Por su parte, el escolta que lleva ya 3 temporadas con el Thunder, convirtió 5 triples para llegar a sus 18 anotaciones, uno más que su compañero mencionado anteriormente. Otra de las claves de su victoria, el ajuste de la puntería desde atrás del arcoíris.
Un Caruso decidido y lleno de confianza por su nivel, ataque al aro sin importar la cantidad de defensores, un solo objetivo: la canasta.
Por parte de los visitantes, no pudieron repetir la hazaña del primer encuentro pero regresan satisfechos a su ciudad con el pensamiento presente de que lograron robarse la localía con su victoria. En este segundo enfrentamiento no tuvieron un buen rendimiento, a pesar de que tuvieron a 7 jugadores en dobles dígitos de anotación, ninguno logró llegar a los 20 puntos, ni siquiera su estrella Tyrese Haliburton. Que tampoco pudo repartir juego con sus anotaciones, uno de sus fuertes, incomodo partido para el base.
Haliburton: molesto, incomodo, confundido y desapercibido en el segundo partido de la serie.
La figura de los Pacers fue autocrítico luego de la caída en el Paycom Center, olvidable noche para él luego de que tuvo 5 pérdidas de balón, empatado con su mayor cantidad en cualquier juego esta temporada (temporada regular y playoffs). Sin embargo, también señaló su total confianza para los próximos dos encuentros en Indianápolis. El base declaró: «Si no eres favorito en una serie de Playoffs, el trabajo es ir a ganar uno fuera de casa. (…) Hay muchas formas en las que puedes decidir digerir lo que tienes por delante. Nos enfocamos en ir día a día. Nos sentimos bien con el 1-1. Queríamos jugar mejor, tenemos que ser mejores para ser exitosos. Es el primero que llegue a siete. Regresamos a casa con empate a uno. Nos encanta jugar ante nuestros aficionados y tenemos que vivirlo día a día».
La gran actuación del MVP y su equipo marcaron historia para los libros de la mejor liga de básquet del mundo. Shai Gilgeous-Alexander ha anotado 72 puntos en dos partidos de esta serie, la mayor cantidad en los dos primeros partidos de las Finales. Además, es el segundo jugador en anotar el doble de puntos que cualquier otro jugador en los dos primeros partidos de la serie de estas instancias, se unió a George Mikan en las Finales de la NBA de 1950.
El tercer partido se jugará el 11 de junio en Indianápolis, en lo que será el primer partido de Las Finales en esa ciudad en 25 años. Oklahoma buscará recuperar su ventaja de localía y Pacers intentará evitarlo, retener lo obtenido, sorprender a todos para ir por más y defender así lo que le corresponde en estos momentos.
Facundo León Ciociano, 2ºA, TN