Tras cerrar su etapa en el Benetton Rugby de Italia, Agustín Creevy eligió despedirse a lo grande. Vuelve al club de sus amores, San Luis, para un último baile con la ovalada. Según trascendió, el hooker podría reaparecer el 2 de agosto en el clásico ante La Plata o el 16 contra Belgrano. Después de esos 80 minutos, se baja del tren.
«Gracias, rugby», arrancó diciendo en una emotiva carta publicada en redes, donde repasó sus hitos. 110 caps con Los Pumas, 51 como capitán, cuatro Mundiales y el orgullo de ser el argentino con más partidos en la celeste y blanca.
El mensaje fue una declaración de amor al deporte que le dio todo. Amigos, valores, golpes y gloria. También tuvo palabras para su familia, su club, sus entrenadores -los buenos y los otros- y su gente.
Con el corazón en la mano, cerró: «Me queda un último round en casa, en mi club, con mi gente. Ahí estaré volviendo a mis raíces».
Creevy no se va, vuelve. Y lo hace a lo grande. Como los que dejan huella.
Vanina González Villalba, 2° A TN