Desde la llegada al poder, Javier Milei desde lo político se centró en controlar la inflación a cómo de lugar, y para ello aplicó un recorte feroz para revertir el déficit fiscal en salud, educación y jubilaciones. A pesar de haber prometido durante la campaña que el ajuste lo iba a pagar la clase política. Las medidas políticas impactaron de lleno en la clase baja, pero sobre todo en clase media. Sin embargo, la imagen del presidente no se veía afectada en estos casi 21 meses de gobierno. Con la difusión de los audios que involucrarían a Karina Milei, en un caso de presunto cobro de coimas en los contratos de la Agencia Nacional de Discapacidad, Javier Milei empezó a perder la imagen positiva ante la sociedad.
Según la consultora Trespuntozero, en una encuesta realizada durante el mes de agosto, con los audios de Diego Spagnuolo señalando a Karina Milei como responsable del cobro de coimas, por primera vez los dirigentes de la Libertad Avanza, Javier Milei y Patricia Bullrich, dejaron los primeros puestos de imagen positiva y fueron superados, ni más ni menos que por Axel Kicillof y Cristina Fernández. Teniendo en cuenta que el slogan del oficialismo en esta campaña es «Kirchnerismo Nunca Más» ¿Podrá el oficialismo hacerse fuerte en la provincia de Buenos Aires a pesar de la recesión económica y las sospechas de corrupción? ¿Cómo repercutirá en los mercados una derrota en los comicios? Son estos los interrogantes que hoy preocupan a Javier Milei y su triángulo de hierro.