Una nueva y peligrosa etapa del conflicto entre Israel e Irán parece haber llegado a una tregua insegura. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este martes desde la OTAN un alto fuego «total» entre ambas naciones, luego de casi dos semanas que estuvieron fuertemente marcadas a nivel mundial por los ataques aéreos, los misiles balísticos, y las muertes que provocó esta guerra.
Esto comenzó el 13 de junio, cuando Israel bombardeó múltiples instalaciones clave en el programa nuclear de Irán en Fordow, Natanz e Isfahán. Desde Teherán se respondió a este ataque con una lluvia de misiles contra territorio israelí y anunció que intensificaría el enriquecimiento de uranio. El espacio aéreo iraní fue cerrado temporalmente y se reportaron cortes de energía en regiones estratégicas.
Aunque Trump aseguró que «nadie saldría herido» tras el alto el fuego, en las últimas horas salió a la luz que ambos países se acusaron mutuamente de violar esta tregua con algunos ataques esporádicos. En la ciudad israelí de Beersheva, proyectiles iraníes alcanzaron zonas residenciales causando muertes de civiles, mientras que Israel mantuvo posiciones ofensivas en la frontera con Siria. En respuesta a esto, el presidente norteamericano, exigió que Israel detenga de inmediato sus ataques contra Irán: «ISRAEL. NO LANCEN ESAS BOMBAS. SI LO HACEN, SERÁ UNA VIOLACIÓN GRAVE. ¡TRAIGAN A SUS PILOTOS A CASA, YA! DONALD TRUMP, PRESIDENTE DE ESTADOS UNIDOS».
Desde Washington, la Casa Blanca defendió el ataque inicial, calificándolo como un «golpe quirúgico» al programa nuclear iraní, al que consideran al igual que Israel una amenaza tanto regional como mundial en caso de que se permita el avance. De hecho, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, afirmó que el objetivo de estos ataques era «contrarrestar la amenaza iraní a la propia supervivencia de Israel».
Este conflicto es el resultado de un enfrentamiento que lleva décadas formándose. Hasta 1979, Israel e Irán mantenían relaciones diplomáticas activas. Hasta que una revolución en Israel fue mal vista por Irán, que decidió romper lazos y tachar al estado de Israel como ilegítimo. A partir de ahí comenzó a financiar grupos armados como Hezbolá y Hamás, que son declarados enemigos del gobierno israelí, quienes ya estuvieron en conflicto hace poco en el año 2021.
Hasta el momento este enfrentamiento dejó un aproximado de 610 civiles iraníes y 28 israelíes fallecidos, además de graves daños en infraestructuras estratégicas como refinerías y redes eléctricas. Esto sumado a los reportes sobre cortes de energía y los daños en instalaciones civiles en Irán y el sur de Israel.
Tras 12 días de intensos ataques entre ambos países, la comunidad internacional, incluyendo líderes de la UE y la OTAN, solicitó que se retomen las negociaciones diplomáticas. Mientras tanto, Israel reafirmó su disposición a nuevas operaciones si se rompe la tregua, y el presidente iraní alertó que cualquier agresión imprudente sería respondida con firmeza.
En relación a todo esto, el presidente Javier Milei expresó su respaldo público al bombardeo estadounidense contra Irán, ordenado por Trump. A través de sus redes sociales re twitteó mensajes de Trump y del primer ministro israelí, y declaró que Irán es «enemigo de Argentina», alineándose así con Estados Unidos e Israel en lugar de optar por la paz como hicieron otros países sudamericanos. Esta posición generó críticas desde la oposición argentina, que advirtió sobre una posible violación constitucional al declarar al país asiático como enemigo sin previa intervención del congreso.
Al mismo tiempo, se solicitó un juicio político contra Milei tras estas declaraciones. La oposición y otros sectores cuestionan como esta postura podría exponer a Argentina a represalias y alejarla de los valores de la paz. Uno de los tweets por los que se generó este problema fué: «Solo hay que ver quiénes son los que apoyaron a Irán para advertir que la Argentina está del lado correcto de la historia. Estados Unidos e Israel están al frente de la defensa de la cultura judeocristiana, occidente y el capitalismo».
Por otra parte, Milei ya había reflejado cierta cercanía ideológica y diplomática con Trump, que fué reforzada además en encuentros personales como el de CPAC en Estados Unidos. En julio del 2024, tras el intento de atentado contra el entonces candidato a la presidencia estadounidense, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, se refirió a este hecho e hizo alusión al intento de asesinato de la ex presidenta de nuestro país Cristina Fernández de Kirchner en 2022: «El candidato Trump, lejos de victimizarse o pretender que se dicte un feriado, va a participar de la convención americana en Milwaukee». Esta situación como tantos otros posteos o fotos juntos, sirven para comprender el respaldo de Milei hacia Trump en la actual guerra.