«Deberían flexibilizar la salida para los niños menores de seis años»

Los niños, especialmente los menores de 6 años, tienen la necesidad de salir a la calle para regular su desarrollo neuronal y recibir estímulos vitales, por lo […]

Los niños, especialmente los menores de 6 años, tienen la necesidad de salir a la calle para regular su desarrollo neuronal y recibir estímulos vitales, por lo que las autoridades deberían empezar a permitirles salir de casa durante esta etapa excepcional de confinamiento por la crisis del Covid-19. Así asegura la psicóloga para niños, Silvia Coronel.

La especialista, que ejerce su profesión en Lanús, se muestra convencida de que “el confinamiento dejará secuelas en los más pequeños” e insiste en que “los padres también necesitan algún respiro”.

«Creo que a los niños, especialmente a los menores de 6 años, se les debería empezar a permitir salir de casa. Por supuesto que los mayores de esa edad también lo necesitan, pero con ellos se puede razonar, pueden entender y regular su comportamiento y adaptarse mejor a unas rutinas”, dijo la psicóloga. Cuenta que lo niños no están preparados para expresar sus emociones a tan temprana edad, y explica que están en un proceso de “fase de desarrollo neuronal”.

Coronel también explicó que podría ser favorable a los padres o tutores de estos niños poder tener un respiro hacia ellos y al encierro que, como es sabido, no es fácil una crianza dentro de cuatro paredes. Muchos factores intervienen en un desarrollo dentro de una casa, dado que, por el bien de ellos, necesitan respirar y poder vivir en un ambiente exterior, porque el entretenimiento mejora la salud mental.

Este encierro por la cuarentena obligatoria, explica la profesional, puede tener secuelas para los más pequeños, por lo que quizá puedan ver alterado su comportamiento, tener más rabia en el carácter y modificar sus hábitos de sueño o de comida. «Es por eso que es preferible tener en cuenta esto y puedan flexibilizar un poco la salida para los niños de cierta edad ya que podrían tener un periodo de adaptación que no es saludable para esta temprana etapa de niñez», concluyó.