Preocupación por el aumento de secuestros extorsivos

Un tema de creciente preocupación para el gobierno nacional, en estos últimos meses, es el incremento de secuestros, principalmente en Capital Federal y el Conurbano. […]

Un tema de creciente preocupación para el gobierno nacional, en estos últimos meses, es el incremento de secuestros, principalmente en Capital Federal y el Conurbano. En lo que va del año hubo 104 secuestros registrados, y sólo en mayo, un caso cada 29 horas.

En estos últimos dos meses hubo 28 secuestros denunciados en la provincia de Buenos Aires y en Capital Federal; 16 de ellos ocurrieron en un lapso de 12 días. Las zonas en las que se agudiza la problemática se encuentran en el Sur del Gran Buenos Aires: Lomas de Zamora, Merlo, La Matanza, Quilmes y Lanús, mientras que en CABA se ubican al norte, en los barrios de Belgrano y Núñez.

Estos actos delictivos son llamados casos “relámpago”, o secuestro exprés, ya que el modus operandi de estos delincuentes es rápido. La idea es raptar «al voleo». La víctima es capturada cuando circula en su auto o llega a su casa por bandas que quieren resolver el pago del rescate rápido a través de llamadas extorsivas a las familias.

Si se concentra el seguimiento en los últimos dos meses, la cifra mantiene esa tendencia, ya que al menos 28 casos se hicieron públicos a partir de haber sido denunciados en la región que se denomina AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires: Ciudad de Buenos Aire y parte de la Provincia de Buenos Aires) entre el 20 de marzo y el 28 de mayo.

Mapa-secuestros-Capital-GBA_CLAIMA20160530_0050_28

Mapa de secuestros en Capital Federal y Gran Buenos Aires.

El caso más reciente es el de un niño de 10 años que estuvo dos días cautivo en un hotel de Constitución. Ante este hecho, la ministra de seguridad, Patricia Bullrich, dijo que se trabaja para «frenar esta cantidad» de hechos; este año suman 104 casos.

El fiscal federal Carlos Stornelli afirmó que durante los dos días que duró el secuestro hubo «al menos 30 llamadas extorsivas» y que el hecho de que una de las captoras fuera conocida de la familia les provocaba «una gran preocupación por la integridad física del menor».

Todos los jueces, fiscales y jefes de las fuerzas de seguridad coinciden en que las bandas que hoy secuestran no son organizaciones sofisticadas. Se trata de grupos que provienen de delitos como las entraderas o los robos más comunes.

La inseguridad es la segunda mayor preocupación de los argentinos, sólo superada por la inflación. El 55,3% de los argentinos indica a la delincuencia como un problema que el gobierno de Mauricio Macri debe resolver. El índice ha bajado drásticamente con respecto al pico que alcanzó en junio de 2015, cuando rozó el 82%; sin embargo, la percepción de riesgo social es aún alta: el 80,1% de los argentinos considera que la inseguridad pueda crecer durante los próximos meses.